Ortesis en pacientes con pie equino

Las ortesis son dispositivos adaptados externamente sobre cualquier región anatómica que modifican sus características estructurales o funcionales para mantener, mejorar o restaurar la función alterada de la zona del cuerpo que lo necesita, y es importante no confundirlas con prótesis.

La ortesis tobillo-pie es un tipo de ortesis que permite estabilizar y mantener las articulaciones de tobillo y pie en una posición articular determinada, restringiendo el eventual movimiento provocado por cualquier fuerza muscular, el efecto de la gravedad, entre otras sobre la articulación. Es importante que en este tipo de ortesis funcionales para la marcha, se utilice calzado adecuado, si es posible calzado con cordones o anchos que permitan la apertura y el uso de una o dos tallas más de calzado para una buena adaptación de la ortesis al calzado. Si es posible, tratar que la ortopedia haga ella los almohadillados correspondientes para el uso de la ortesis y el contacto sea con la piel.

Antes de utilizar la ortesis, se debe asegurar de que la zona a cubrir esté totalmente limpia y seca, ya que residuos orgánicos, productos de cuidados (por ejemplo, crema corporal) o de sudor pueden causar trastornos en la piel y causar el desgaste precoz de la ortesis.

La compresión de los sistemas de sujeción de la ortesis al cuerpo nunca debe ser excesiva para evitar irritaciones en la piel o trastornos circulatorios.

Se recomienda la utilización de un calcetín de algodón entre la piel y la ortesis, asegurando que esté bien estirado y no se formen arrugas que podrían acabar dañando la piel.

Las personas que no tienen la capacidad de sentir dolor o presión en sus miembros inferiores deben revisar las áreas o puntos de contacto con la ortesis constantemente, ya que en el caso de presencia de zonas enrojecidas que no se desvanecen luego de 20 minutos después de su uso, debe ser informadas a su profesional tratante.

Para obtener las condiciones adecuadas de uso de este tipo de elemento, debemos considerar sus cuidados asociados, para llevar a cabo este objetivo se debe tener presente lo siguiente:

    • Limpiar las secciones termoplásticas por lo menos una vez por semana usando un jabón neutro y agua fría.
    • El secado de la ortesis debe ser con un paño limpio y seco, a temperatura ambiente.
    • No exponer elementos directamente al sol o a un artefacto de radiación de calor.
    • Las uniones metálicas de la ortesis requieren lubricación periódica. Consulte a su profesional técnico qué tipo de lubricante utilizar.